Mes De Los Abuelos

EN EL MES DE LOS ABUELOS , ESTAMOS REALIZANDO UNA BÚSQUEDA...¿ quién será la persona más longeva de Chapicuy? Quién tien más años de todos los habitantes de nuestra localidad??

Para comenzar estuvimos investigando sobre:"el Abuelo Courdin"...

102 años...

Ya no está entre nosotros, pero llegó a los 102 años...

Hablamos del Abuelito Courdin, de una de las personas más longevas en Chapicuy, tenemos todos un recuerdo importante de su persona.

Medy , una de sus nueras, esposa del Sr. Roberto Courdin, se acerca a nuestro Centro Mec para conversar sobre el Abuelito y darnos datos de su larga vida y poder recordarlo en este MES DE LOS ABUELOS!.

¿ Cuál era su nombre completo?

Ernesto Courdin Solberger.

¿ En qué fecha nació y dónde?

20 de noviembre de 1900 en Colonia Valdense, Dpto de Colonia.

Lo inscribieron, como era común en la época, en febrero de 1901.

¿Cuántos años vivió?

Falleció a los 102 años de edad.

¿Qué se sabe acerca de sus padres?

Su padre David Courdin, su madre Angelina Solberger, él inmigrante del norte de Italia , ella de Suiza.

Dato anecdótico, sobre la historia de amor de sus padres:

David, viviendo en Uruguay, decide operarse de la vista en Suiza, país donde conoce a Angelina; ella que visitaba en forma solidaria a los enfermos en los hospitales en su ciudad, lo conoce y lo acompaña en su recuperación, dado que se encontraba solo , lejos de sus familiares.

Deciden que serán el uno para el otro y que sus vidas nunca más se separarían.

Así es que forman su familia en Uruguay y tienen 4 hijos, uno de ellos... Ernesto Courdin y tres hermanas.

¿Dónde creció el Abuelo Courdin?

A los 6 años de edad, su familia se traslada de Colonia a la zona de Curtinas, en “Rincón de los Machados” en el dpto. de Tacuarembó.

Ya siendo mayor se casa con Haydee Silva, maestra,  y forman una familia , tienen 6 hijos: Ernesto Nelson, Arnoldo, Orlando quien aún vive en nuestra zona , Ariel, Roberto , quien también aún vive en Chapicuy, y Myrian.

En la década del `40, se instala con su familia en un campo cerca de lo que es hoy el centro poblado Chapicuy, que en ese momento estaba en plena formación, se traslada con algunos de sus hijos mayores primero en carros y carretas y luego traslada a toda la familia.

¿A qué se dedicaba ?

Siempre se dedicó a la agricultura y ganadería.

Ya cuando estaba muy mayor, accedió a trasladarse a su casa en el centro poblado y su trabajo y su vida pasaron a ser los de atención en la Estación Ancap de Chapicuy,  propiedad de uno de sus hijos, Roberto, y así hizo de pistero, de sereno, entre tantas otras actividades que desempeñaba en la estación.

Su perfil sereno y su semblante inconfundible pareciera que todavía forman parte del paisaje de la Ancap donde pasó tantas horas de su años de abuelo, sentado en su silla petisa, de cuero, fabricada por él mismo,    a la espera de sus clientes...
Desde donde esté hoy el “Abuelito Courdin” le llegue nuestro humilde homenaje...

Gracias Medy Büchner por acercarnos a su historia de vida.

DE RECORRIDA POR LOS ABUELOS:
Estuvimos visitando a unas de las personas de mas edad de la zona, el señor Francisco Tuduri  de 93 años y su señora Aida Violeta Charoto de 82 años.
En breve les contaremos la historia..

 Francisco Tuduri

Francisco Tuduri entrevistado por Centro Mec Chapicuy

93 años- Vive con su esposa  Aída Violeta Charoto de 82 años y su perro “Bronco” de raza policía, que no dejó de  ladrar desde que llegamos hasta que nos fuimos.

¿Cuál es su nombre?

Francisco Tuduri

¿Qué fecha nació ?

Nací el 12  de Mayo de 1918.

¿Dónde nació y se crió?

En Salto nací y estuve viviendo hasta los 14 años, después nos fuimos con mi padre al campo, en el departamento de Sato.

¿Cuánto hace que vive en su casa en la zona de Chapicuy?

61 años  hace que vivimos  acá en mi casa en la zona de Chapicuy, tantos como años tienen de casados.

El ambiente cálido de la casa de Francisco y Su señora Adela, invitaban a quedarse, en esa tranquilidad propia de la naturaleza rural.

Agradecemos muchísimo el tiempo compartido y la  amabilidad de ambos, que aunque los tomamos por sorpresa, no dudaron en colaborar y contarnos su historia.

Gracias a Roberto que nos llevó hasta su casa y a Pilar nuestra secretaria, un verdadero trabajo de equipo.

Seguiremos con más historias... 

                                                                                                Sylvina y Marcelo.